Qué rico olor el olor a pan recién cocido! Qué apetito entra al pasar por delante de las panaderías! Esta tarde el rico olor salía de mi cocina con estos panecillos que casi me los como crudos. Es una receta muy sencilla y rápida y no necesitamos hacer una masa madre previa. Lo que nos permite no tener que planificar la receta con días de antelación. Y están bueníiiisimos con queso.
...necesitamos...
- 200 g de harina de centeno
- 180 g de harina de trigo de fuerza
- 1 sobre de levadura seca instantánea
- 200 ml de leche entera
- 1 cucharada de miel
- 1 puñado de uvas pasas (o más, según gusto)
- 1 pizca de sal
Mezclamos las harinas con la levadura, la miel, las uvas pasas y la sal y trabajamos con las manos unos minutos hasta hacer como migas de pan. Yo he usado la panificadora, pero os pongo el proceso manual para que podais hacerlo los q no tengais amasadora. En la panificadora añadimos los ingredientes anteriores y amasamos.
Añadimos la leche poco a poco y vamos amasando hasta que la masa sea poco pegajosa y manejable. Hacemos una bola y la envolvemos en papel film y reposará durante 10 minutos aprox. en un sitio cálido.
Con un rodillo extendemos la masa sobre una superficie enharinada, hasta conseguir un grosor de 1,5 cm de grosor. Con un cortapastas (yo usé un vaso para hacer los panes más grandes) formamos los panecillos. Los colocamos en una bandeja de horno cubierta de papel de horno y los dejamos reposar tapados con un paño durante al menos 20 minutos.
Mientras reposan los panes, precalentamos el horno a 200 ºC. Los horneamos durante 20 minutos hasta que estén ligeramente tostados. Dejamos entibiar para servir.
BUEN PROVECHO!!
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